Pese a la débil economía, las empresas de EE.UU. gozan de buena salud
Pese a las preocupaciones sobre el debilitamiento de la economía de Estados Unidos, las empresas del país siguen mostrando buenos resultados.
Pocas compañías han reducido recientemente los pronósticos de sus ganancias para el segundo trimestre y muchos presidentes ejecutivos desechan la idea de una nueva recesión, aunque advierten que el camino de la recuperación está lleno de baches. "Creo que vamos a tener un crecimiento desigual en Estados Unidos", reconoce Andrew Liveris, presidente ejecutivo de Dow Chemical Co. "A veces lo llamo la espalda de un cocodrilo".
Maquinaria de Caterpillar
Por el lado positivo, la demanda de los mercados emergentes, donde las grandes empresas estadounidenses realizan una porción cada vez mayor de sus negocios, ha impulsado los ingresos y compensado el preocupante aletargamiento en EE.UU. Los recortes de costos hechos durante la recesión, asimismo, volvieron a las empresas más eficientes y les permiten hacer más con menos trabajadores. Ello apuntala las ganancias, las que a su vez refuerzan la inversión de las empresas en maquinaria y software.
Se espera que las utilidades combinadas del segundo trimestre de las empresas que conforman el índice S&P 500 sean 13,6% más altas que en el mismo lapso del año previo, según las previsiones de la firma de servicios financieros Brown Brothers Harriman.
Sin embargo, el crecimiento de las ganancias debería perder fuerza durante el resto de 2011 debido a que las comparaciones con el mismo lapso de 2010 se vuelven más exigentes. Las dudas en torno a la economía estadounidenses siguen vigentes, aunque se han moderado. El Promedio Industrial Dow Jones subió 5,4% la semana pasada, su mayor alza porcentual semanal desde julio de 2009, para cerrar en 12.582,77 puntos.
Pero las esperanzas para el resto del año son limitadas por la debilidad de los mercados de trabajo e inmobiliario y el alza en los precios de las materias primas. "Salimos del fondo... pero nunca alcanzamos una recuperación sólida", dice Ronald DeFeo, presidente ejecutivo de Terex Corp., el fabricante de grúas y otros equipos para la construcción.
Un sector que ha sentido el impacto con singular fuerza es el de las empresas orientadas al consumo interno. El Departamento del Comercio informó que el gasto del consumidor se estancó en mayo, luego del crecer apenas el 0,3% en abril.
"Varios de nuestros grandes clientes revisan a la baja sus expectativas de crecimiento en EE.UU. para este año, apuntando a la debilidad de los niveles de confianza del consumidor y las tendencias de gasto por debajo de lo esperado", expresó a principios de junio Mark Ketchum, presidente ejecutivo de Newell Rubbermaid Inc. El fabricante de los productos para bebés Graco y los utensilios de cocina Calphalon, entre otras marcas, advirtió que sus ganancias para el segundo trimestre serían hasta 15% menores a lo previsto.
Las empresas con mayor exposición a las economías emergentes son más optimistas. Caterpillar Inc., el mayor fabricante mundial de maquinaria para la construcción y la minería, ha sido uno de los grandes beneficiarios del gasto internacional en infraestructura y del auge mundial minero. La empresa confirmó recientemente su pronóstico de ganancias para todo el año, de entre US$6,25 y US$6,75 la acción, frente a US$4,15 en 2010.
Una cuestión clave es si las empresas son capaces de traspasar los mayores costos de materias primas como el algodón, el aceite e incluso la chatarra. La siderúrgica Nucor Corp. espera que las utilidades del segundo trimestre fluctúen entre 75 y 80 centavos por acción gracias a una mayor demanda de la industria automotriz, de maquinaria pesada y de las firmas de energía, además de precios más altos.
Fuente: Wall Street Journal
Pocas compañías han reducido recientemente los pronósticos de sus ganancias para el segundo trimestre y muchos presidentes ejecutivos desechan la idea de una nueva recesión, aunque advierten que el camino de la recuperación está lleno de baches. "Creo que vamos a tener un crecimiento desigual en Estados Unidos", reconoce Andrew Liveris, presidente ejecutivo de Dow Chemical Co. "A veces lo llamo la espalda de un cocodrilo".
Maquinaria de Caterpillar
Por el lado positivo, la demanda de los mercados emergentes, donde las grandes empresas estadounidenses realizan una porción cada vez mayor de sus negocios, ha impulsado los ingresos y compensado el preocupante aletargamiento en EE.UU. Los recortes de costos hechos durante la recesión, asimismo, volvieron a las empresas más eficientes y les permiten hacer más con menos trabajadores. Ello apuntala las ganancias, las que a su vez refuerzan la inversión de las empresas en maquinaria y software.
Se espera que las utilidades combinadas del segundo trimestre de las empresas que conforman el índice S&P 500 sean 13,6% más altas que en el mismo lapso del año previo, según las previsiones de la firma de servicios financieros Brown Brothers Harriman.
Sin embargo, el crecimiento de las ganancias debería perder fuerza durante el resto de 2011 debido a que las comparaciones con el mismo lapso de 2010 se vuelven más exigentes. Las dudas en torno a la economía estadounidenses siguen vigentes, aunque se han moderado. El Promedio Industrial Dow Jones subió 5,4% la semana pasada, su mayor alza porcentual semanal desde julio de 2009, para cerrar en 12.582,77 puntos.
Pero las esperanzas para el resto del año son limitadas por la debilidad de los mercados de trabajo e inmobiliario y el alza en los precios de las materias primas. "Salimos del fondo... pero nunca alcanzamos una recuperación sólida", dice Ronald DeFeo, presidente ejecutivo de Terex Corp., el fabricante de grúas y otros equipos para la construcción.
Un sector que ha sentido el impacto con singular fuerza es el de las empresas orientadas al consumo interno. El Departamento del Comercio informó que el gasto del consumidor se estancó en mayo, luego del crecer apenas el 0,3% en abril.
"Varios de nuestros grandes clientes revisan a la baja sus expectativas de crecimiento en EE.UU. para este año, apuntando a la debilidad de los niveles de confianza del consumidor y las tendencias de gasto por debajo de lo esperado", expresó a principios de junio Mark Ketchum, presidente ejecutivo de Newell Rubbermaid Inc. El fabricante de los productos para bebés Graco y los utensilios de cocina Calphalon, entre otras marcas, advirtió que sus ganancias para el segundo trimestre serían hasta 15% menores a lo previsto.
Las empresas con mayor exposición a las economías emergentes son más optimistas. Caterpillar Inc., el mayor fabricante mundial de maquinaria para la construcción y la minería, ha sido uno de los grandes beneficiarios del gasto internacional en infraestructura y del auge mundial minero. La empresa confirmó recientemente su pronóstico de ganancias para todo el año, de entre US$6,25 y US$6,75 la acción, frente a US$4,15 en 2010.
Una cuestión clave es si las empresas son capaces de traspasar los mayores costos de materias primas como el algodón, el aceite e incluso la chatarra. La siderúrgica Nucor Corp. espera que las utilidades del segundo trimestre fluctúen entre 75 y 80 centavos por acción gracias a una mayor demanda de la industria automotriz, de maquinaria pesada y de las firmas de energía, además de precios más altos.
Fuente: Wall Street Journal


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